Ecos y ceremonias de última semana

Crónicas próximas pasadas, señalamientos de hoy y un guiño al día siguiente, en la agenda que no para de transcurrir sobre los hechos artísticos.

Por Gabriel Abalos
gabrielabalos@gmx.com

Qué noche de rock, pelado

La banda Sunset tocó el sábado en Casa Babylon.

Era sábado, Abasto, Casa Babylon, nueve y media de la noche, y allí flotaba la presencia astral del pelado Servetto, que se fue hace cuatro años. Se preparaban a salir a escena, cada uno con su propuesta, el par perfecto restante de aquel trío inolvidable que fue Rastrojero Diesel. Tocaban la Banda Local, de Ullún, San Juan, con el Flecha Solera al frente, y la banda Sunset, con Mario Valenzuela en el bajo y los coros, y al frente su hijo Farid, un joven rockstar de 18 años que la rompe. La fuerza triangular mantuvo su power: la banda sanjuanina desplegó un trío clásico, bien de pueblo, y Sunset tocó como trío gran parte de la velada, hasta la incorporación de un nuevo y joven guitarrista. Fue una noche de rock, esa cadena de transmisión y tradición de la vieja bohemia, y de sus búsquedas genuinas al margen de la industria del género. Fueron momentos mágicos, hubo sentimientos y empuje, por momentos, arrollador. Tal vez sea cierto que el rock ha muerto, algo más que discutible; pero reaparece como el gran pez, y corre por las venas de los viejos laburantes del género, casi sacerdotes de un culto vital, así como por las de pibes que crecieron arrullados por su vibración original. Son futuros de pasados bien presentes, que florecen y muestran que no es pop todo lo que brilla. Hubo solos electrizantes, ramos de emoción, fe, recuerdos y mundos por descubrir. La imagen de José Servetto pasó por la pantalla, se oyeron ecos de su voz, como ráfagas del paso de aquel camioncito criollo de carga que le prestó el nombre a una banda imborrable. De allí todavía se cosechan muy buenos frutos.

Autora cordobesa premiada en Chile
El pasado miércoles 22 de marzo, dos escritoras argentinas recibieron en Chile sus galardones por el primero y el segundo puesto en el Primer Concurso Latinoamericano de Cuentos Marta Brunet. El primer premio fue para la poeta y escritora de Bahía Blanca, Valeria Tentoni, y el segundo premio le fue entregado a la cordobesa Nora Pojomovsky. Si bien la autora local aparece como una recién llegada a la escena literaria, con sus setenta y dos años posee un largo oficio de escritura. En una entrevista con ocasión de recibir su premio por el cuento La trocha es una herida abierta, Pojamovsky expresó que, para ella, “Escribir es un lugar de absoluta verdad, donde tienes que desnudar la palabra hasta que quede sin forma, hasta llegar al corazón del otro, que es para lo que uno escribe.”
Ambas autoras se impusieron sobre un total de seiscientas propuestas recibidas en el concurso. Sus premios les fueron entregados en el marco de un homenaje a la escritora Marta Brunet, cuyo nombre perpetúa este reconocimiento en que se convocaba a autoras de Uruguay, Argentina y Chile.
Marta Brunet (1897-1967) fue una diplomática y novelista chilena que pese a haber obtenido genuinos reconocimientos en las letras, fue negada por la historia patriarcal de la literatura. Ganadora en 1961 del Premio Nacional de Literatura, que antes de ella solo había obtenido Gabriela Mistral, falleció en 1967, mientras agradecía en Montevideo su incorporación a la Academia Nacional de Letras de Uruguay.
La premiación a las escritoras argentinas se realizó en la casa central de la Universidad de Chile, donde fue descubierta una placa de benefactores, acto de reivindicación que dejó incorporado oficialmente el nombre de Marta Brunet en dicha institución. 

Galardones anuales a teatristas
Esta tarde en la sala Carlos Giménez del Teatro Real (San Jerónimo 66) tendrá lugar la ceremonia de entrega de los premios provinciales anuales de Teatro Siripo, acto vinculado al Día Mundial del Teatro que se conmemoró este lunes. El Premio Provincial de Teatro fue rebautizado con el nombre de un elenco independiente pionero de Córdoba, y hoy se revelará a los ganadores entre las ternas propuestas para su premiación en trece diferentes rubros que reconocen las producciones técnicas y artísticas. En esta edición se entregarán distinciones especiales: un Reconocimiento a la Trayectoria para el Grupo Fra Noi de Colonia Caroya; Reconocimiento a Sala Teatral Independiente para La Panadería de Villa María; a Evento Destacado, para el Festival Vamos Que Venimos”, Regional Córdoba. A Mejor Obra Nacional presentada en Córdoba 2022: Yo también quiero ser un hombre blanco heterosexual, de la Compañía Teatro Casero, de Rio Negro. Y a Mejor Obra Internacional presentada en Córdoba 2022, para DoodlePop, por Brush Teather de Corea del Sur.
La ceremonia contará también con un tributo al recordado director Carlos Giménez, al conmemorarse los 30 años de su fallecimiento. En la ocasión el querido actor Lito Fernández Matheu, junto a integrantes de la Comedia Cordobesa, de la Comedia Infanto Juvenil y del Seminario de Teatro Jolie Libois dirigidos por Martín Gaetán, Eugenia Hadandoniou y Matías Etchezar, realizarán  intervenciones presentando fragmentos de inolvidables puestas de Giménez como El Reñidero y El Coronel no tiene quién le escriba. La entrada es sin cargo, se retira en boletería hasta agotar capacidad de sala.

Pao Bernal en el Patio de las piedras
Mañana habrá un nuevo encuentro en el ciclo musical Que no sea un Día de Miércoles, en el Patio de las piedras del Centro Cultural de la UNC (Duarte Quirós 107). A partir de las 20, actuará Paola Bernal en bombo y voz, junto a la guitarrista Pampi Torre, interpretando canciones de su nuevo disco Agua de Flores: un canto de raíz, con texturas de un ahora que conviven en esta dimensión sonora, beats y bombos. Entrada gratuita por orden de llegada, hasta llenar la capacidad.