El Comité de la Unión Cívica Radical (UCR) de Córdoba sostuvo ayer que la renuncia del ministro de Salud provincial, Diego Cardozo, “pone de manifiesto la responsabilidad que tiene el Gobierno” local con respecto a los fallecimientos de bebés nacidos sanos en el Hospital Materno Neonatal Ramón Carrillo, que investiga la justicia.
A través de Twitter, la UCR cordobesa consideró que desde el Gobierno provincial “esconden la verdad» y remarcaron la necesidad de «saber qué pasó”.
Por su parte, el diputado Rodrigo de Loredo señaló que “la salud de Córdoba necesita reformas de fondo”. “La salida de Cardozo era imprescindible desde un primer momento frente a los acontecimientos que son de público conocimiento”, agregó. También manifestó la necesidad de que “la Justicia siga trabajando, tiene todo nuestro respaldo para una investigación objetiva” porque “las familias merecen que se sepa la verdad y se haga justicia por el daño irreparable que se les ha hecho, y los cordobeses que no se repita nunca más una tragedia de esta gravedad”.
En tanto, el presidente del bloque de diputados nacionales del radicalismo, Mario Negri, manifestó que la renuncia del funcionario “comienza a mostrar las responsabilidades políticas”. En ese sentido, agregó que las manifestaciones de ese sector político indicando que Cardozo no había realizado denuncias para que se investiguen esas muertes “no eran desproporcionadas y menos demagógicas” y dijo que “recién comienza la búsqueda de la verdad y Córdoba debe conocerla”.
Otra repercusión llegó por el presidente del bloque Juntos UCR, Juan Jure, quien se expresó en idéntico sentido al entender que era “incontenible” la continuidad de Cardozo al frente de la cartera sanitaria.
Jure remarcó que la dimisión del funcionario “no exime al gobierno de su responsabilidad frente a este hecho grave» y adelantó que requerirán la presencia de designada ministra, Gabriela Barbás, a la Legislatura para que «responda todas las inquietudes»
“La sociedad necesita saber por qué murieron los bebés del Neonatal de Córdoba y el Gobierno provincial debe dejar de lado su silencio y contarle a los cordobeses lo que realmente pasó”, planteó.
Además, el bloque de legisladores provinciales de la UCR, en su conjunto, pidió la renuncia de todo el equipo ministerial de Salud.
En un comunicado, los legisladores exigieron “la renuncia de todas las autoridades que acompañaron la gestión sanitaria del ministro de Salud Diego Cardozo, incluidos los actuales interventores del Hospital Neonatal”.
“Entendemos que las responsabilidades funcionales y/o políticas respecto de la catástrofe pediátrica que representa la muerte de bebés, el ocultamiento de la información vital y la omisión de denuncias correspondientes, alcanzan a los funcionarios de Salud que integran la cúpula ministerial y a los actuales interventores del nosocomio”, fundamentaron.
“Como legisladores de Córdoba –continuaron-, es nuestro deber resguardar los derechos de los cordobeses ejerciendo el estricto control del funcionamiento de las instituciones de gobierno y ningún cordobés podrá estar tranquilo si continúan al frente del equipo de Salud los mismos funcionarios y autoridades responsables directa o indirectamente, por acción u omisión, de las políticas sanitarias que derivaron en la irremediable pérdida de vidas inocentes”.
“Es menester, asimismo, salvaguardar la labor profesional e inconmensurable del equipo de salud provincial, especialmente de quienes continúan ejerciendo su labor con responsabilidad en el Hospital Neonatal y merecen funcionarios a la altura para continuar con el servicio público”, completaron.