El Suoem comenzó a desplegar, una semana atrás, movimientos para “unir bases”, a saber, llamó a una convocatoria para una asamblea de delegados en las que incluyó entre los temas a debatir un sinfín de ítems. Entre ellos, adicionales por títulos, ascensos automáticos, bonificaciones por función, cambios de agrupamiento, cambios de horario, cargos rendidos sin designación, convocatoria a concursos de cargos de conducción, deuda salaria, diferencias en bono retribución estímulo, liquidación final, pases a planta, rectificación de calificaciones, servicios extra-comunales, solicitud de chapas y títulos habilitantes.
Ese extenso menú, explican quienes conocen cómo se mueve la conducción, tiene un objetivo claro: interesar a los empleados y delegados de todas las reparticiones en participar de un cronograma de asambleas que acelere el metabolismo del gremio y active a las bases para que se apresten a entrar en conflicto.
Tras esa convocatoria, que tuvo lugar a fines de la semana pasada, el gremio puso fecha a asambleas de dos horas por turno en cada oficina del municipio, empezando a resentir los servicios para captar la atención del Ejecutivo. Luego, llevó adelante una asamblea junto a sus cuerpos orgánicos en Caseros y Arturo M. Bas el miércoles, avisando que pronto la protesta podría pasar a las calles, sumando presión a un frente delicado, ya que las permanentes manifestaciones que en la vía pública llevan adelante diferentes organizaciones sociales ha empezado a colmar la paciencia de los cordobeses.
El oficialismo provincial, de hecho, ya ha tomado nota de ello, y durante la semana pasada ingresó a la Legislatura Provincial un proyecto presentado por Juan Manuel Cid, de estrecha cercanía con el intendente, para limitar en entorpecimiento que estas protestas generan en las calles.
Tras el último movimiento del gremio, que ya había anunciado prolongaría su cronograma de asambleas, el Ejecutivo convocó ayer a su conducción a una mesa de diálogo para tratar sus demandas. El Suoem dispuso entonces suspender la reunión del cuerpo general de delegados fechada para el próximo lunes y suspender las acciones gremiales mientras duren las tratativas.
Resulta de interés, entonces, repasar cuáles son los temas que el sindicato llevará a la mesa. Fuentes gremiales apuntan que el interés del gremio se concentra en tres puntos: conseguir pasos adelante en la carrera hacia la estabilidad de los agentes que, siendo becarios, monotributistas o contratados, quieren alcanzar la planta estable del municipio; que se llame a concursos para consolidar en los mandos medios a quienes hoy revistan en esos cargos en virtud de una designación precaria (interinos), y probablemente empezar a discutir una reapertura de las paritarias, frente a una evolución de la inflación que supera mes a mes los pronósticos del Gobierno Nacional.
En relación al inicio de las presiones para que los agentes municipales que aún no han alcanzado la estabilidad la consigan, es de esperarse que vayan incrementándose conforma corre el tiempo y la actual gestión se acerca a su recta final, con el destino de su GPS fijado en el Centro Cívico.
La campaña será, como siempre, un momento de debilidad relativa para el Ejecutivo, que preferirá que la atención de los vecinos esté puesta en el shock de obras con el que el PJ espera coronar su ciclo al frente del Palacio 6 de Julio, y no en los desmanes que un Suoem en conflicto pueda generar.
En cuanto al llamado a concursos para que los mandos medios interinos alcancen la estabilidad, existe ahí una decisión delicada para el oficialismo. Un ex intendente que hace ya años dejó el Palacio 6 de Julio solía decir que el Suoem defendía a los malos empleados, porque los buenos se defendían solos.
Aún sin dar demasiada entidad a ese juego de palabras, nadie cree que el sindicato esté interesado en defender el acceso a los cargos públicos “para los más capacitados”. Los concursos municipales son, desde hace largos años, hechos a medida para quienes finalmente resultan beneficiarios, y eso se consigue con una jugada poco sutil, pero muy efectiva: concediendo un puntaje extra a quienes ya prestan funciones en esos cargos que en la realidad resultan indescontables por quienes esperen competir “desde el llano”.
Así, se cristalizará al frente de los cargos jerárquicos de las oficinas municipales a agentes que tributan al gremio y ocupan esos puestos desde antes de la llegada del peronismo al Palacio 6 de Julio. Antes, cuando recién arrancaba el actual mandato, los peronistas que caminan los pasillos de la Municipalidad veían esto con desconcierto. Ahora ya lo ven con resignación.