Por Julieta Fernández
Restan 21 días para que se lleven adelante las elecciones en el Sindicato de Trabajadores Municipales. Una de las listas opositoras (la última en darse a conocer en la previa al cierre de listas) es la Azul, tradicionalmente referenciada en Adolfo Bildoza y que llevará a Diego Pinto como candidato a secretario general. Tras el conflicto entre la conducción del STM y el directorio del Ente de Prevención Ciudadana, la lista Azul se expresó al respecto y pidió a Walter Carranza, histórico titular del sindicato hace más de 20 años, que “se baje del caballo”. “Lo que usted no dice (en referencia a Carranza) es que ese caballo iba a tiro de una carreta con trabajadores municipales y hace rato que la desenganchó”, reza un fragmento del comunicado que compartieron desde la Lista Azul luego de que se conociera el cese del estado de asamblea en el ex Edecom.
“Nos resulta incomprensible su reelección, sabiendo que nunca va a cambiar porque siempre ha sido funcional a cada gobierno de turno”, es otra de las frases que apuntan a Carranza tras considerar que parece “tragicómico” que el dirigente sindical denuncie un vaciamiento del ente. Desde el espacio que lleva a Pinto como candidato, manifestaron que en el propio Corralón Municipal (área en la que se desempeña Carranza) habría faltante de maquinaria y herramientas. Señalaron que en el cementerio municipal también ocurriría algo similar (con personal que llevaría sus propias herramientas de trabajo) y mencionaron que en otras áreas como Economía, Registro Civil y dispensarios municipales se trabajaría con “recursos obsoletos”.
Otra de las críticas que lanzaron contra la actual conducción del sindicato implica una promesa incumplida en torno a facilitar el acceso a la vivienda propia para los afiliados municipales. Señalaron que el 80% de los trabajadores municipales de Río Cuarto trabajaría un promedio de más de 10 horas (en general mediante horas extras). También hicieron mención a los perjuicios económicos denunciados a comienzos de este año a partir de los créditos que tomaron algunos afiliados y en los que el gremio actuó como intermediario. En aquel entonces, la agrupación Municipales Autoconvocados (actual Lista Verde) denunció que a dichos empleados se les descontó el dinero de sus haberes pero el sindicato no abonó dichas cuotas a la financiera en cuestión.
Una de las últimas promesas del histórico dirigente gremial fue el pase a planta permanente de los trabajadores contratados (algo que se había prometido en la última elección del STM y aún no se habría materializado). Aunque desde la lista Azul aseguran que “el final de Carranza está cerca”, también dejaron entrever que el secretario general se aferraría a una nueva reelección por “contar con el apoyo de cada gobierno de turno y esta vez tampoco será la excepción”. Este tipo de expresiones podría sugerir que, pese a demostrar cierto optimismo ante el potencial fin de la era Carranza, también habría una cuota de escepticismo respecto de su salida del gremio que dirige desde hace más de 20 años. Los últimos guiños del Ejecutivo Municipal (el pago adelantado del aumento salarial del último acuerdo) refuerzan la idea de que, pese al paro de agentes del ex Edecom, la relación entre el PJ y Carranza se encuentran en buenos términos.
La dispersión de la oposición en dos listas también contribuye a pensar que Carranza podría permanecer cuatro años más al frente del sindicato. La lista Azul, pese a mostrarse activa en sus propuestas (entre las que se encuentra una recomposición salarial por encima de la canasta básica, pase a planta permanente y la participación de los jubilados municipales en la mesa salarial), también tiene cierto estigma “carrancista” (ya que algunos de sus referentes han integrado la lista del propio Walter Carranza en oportunidades anteriores) o radical (su candidato, Diego Pinto, habría sido colaborador de la ex 30 de Octubre, actual Evolución Radical).
Desde este núcleo del radicalismo (que actualmente tiene como referente al concejal Gonzalo Parodi), aseguraron no apoyar a ninguna de las listas que competirán el próximo 23 de junio. No obstante, la dirigencia política de Río Cuarto también seguirá de cerca el proceso eleccionario y estará expectante de conocer si será el fin de la era Carranza o si habrá un sexto mandato para el histórico secretario general.