Por Bettina Marengo
Los intendentes y jefes comunales peronistas del departamento Colón le dieron un fuerte espaldarazo al candidato a gobernador del PJ, que según todo indica será el intendente de la Capital, Martin Llayrora, al proponer pegar las elecciones locales a las provinciales, el año que viene, para el caso de los que puedan por carecer de Orgánica propia.
La oferta llegó de boca del intendente de Malvinas Argentinas, Gastón Mazzalay, quien el miércoles lanzó la idea en el acto de entrega de diplomas de las nuevas autoridades del PJ colonense, que se realizó en la sede del Sindicato de Empleados Públicos de Saldán. El tema había sido conversado por los jefes territoriales, con la intención de apoyar al oficialismo en su objetivo de retener el poder provincial y de fortalecerse cada uno de ellos con la tracción del candidato a la Gobernación. “Un esfuerzo conjunto” sostuvo Mazzalay.
La arenga fue ante un nutrido grupo de dirigentes del populoso departamento Colón y frente a parte de los caciques del schiarettismo, incluidos el presidente provisorio de la Legislatura, Oscar Gonzalez, y el presidente del bloque de Hacemos por Córdoba, Francisco Fortuna. El dato no es menor. A ellos y al ministro de Gobierno, Facuando Torres, mira el intendentato oficialista para que agilicen los tiempos para habilitar la re-reelección, sin la cual se reduce el margen de acción y las buenas intenciones de los alcaldes.
Por lo demás, el espaldarazo al Panal y a sus decisiones políticas se da luego de que parte de los jefes comunales del PJ-Hacemos por Córdoba rompieran con el oficialismo para armar un bloque propio con identidad peronista-albertista. Hoy se confirmaría el paso, con la presentación de una nueva nota a Torres, con veintipico de firmas avalando el Frente Peronista Cordobés (la primera nota fue objetada porque solo la firmaron dos en representación del resto). A esto se suma que, desde otro sector del peronismo-frentetodismo, los intendentes que responden a Martin Gill están haciendo sonar ruidos de tambores para el lanzamiento de la candidatura a gobernador del villamariense. Por eso, aunque es un hecho que el Panal iba a pedir la unificación de las fechas, la iniciativa de Mazzalay es también una jugada política de diferenciación.
En el encuentro que se realizó en Saldán estuvieron, además de Mazzalay y el anfitrión Cayetano Santo, los jefes comunales de Tinoco, Gustavo Bustos, de La Granja, Carlos Ambrosich, de El Manzano, José María Garzón, de Cerro Azul, María Laura Wherli, de Mi Granja, Claudia Acosta, y los intendentes de Río Ceballos, Eduardo Baldassi, y de Colonia Caroya, Gustavo Brandan, quien tiene Carta Orgánica propia. No participó el intendente de Unquillo, Jorge Fabrissin, pero envió un representante. Tampoco estuvo Facundo Rufeil, de La Calera.
Entre los mencionados, son varios los que no podrían aspirar a un nuevo mandato si no se reforma la ley: los jefes comunales de Saldan, Tinoco, Mi Granja, La Granja, Unquillo. En la misma está el intendente de Estación General Paz, Carlos Borgobello, que juega en el espacio de Martin Gill.
La conducción del PJ viene moviéndose por todos los departamentos con la “excusa” de entregar los diplomas a los dirigentes que quedaron desingados con cargos partidarios en las últimas internas, que solo se realizaron como tal en los departamentos de Punilla y Calamuchita. Además de Gonzalez y Fortuna, en el acto de Saldán estuvieron el ministro de Agricultura Sergio Busso, que funge de apoderado schiarettista en el partido y los legisladores provinciales Carlos Presas (departamental) y Rodrigo Rufeil, enfrentado al ausente intendente de La Calera.
En el acto, asumieron sus cargos partidarios Santo, como presidente del PJ de Colon, Presas como uninominal y Brandan como primer congresal provincial.