Por Julieta Fernández
El intendente de La Cautiva,

, renunció a su cargo al frente de la UCR departamental tras ser denunciado por violencia de género. Según pudo saber Alfil, algunos sectores del partido centenario habrían planteado que Beltramone debería dejar el cargo para el cual ya había pedido licencia a partir de lo que establece el protocolo contra la violencia de género en el partido. Quien lo reemplazó durante ese período de licencia (que duró aproximadamente ocho meses) fue María del Carmen Cabral. La referente alfonsinista será la nueva presidenta de la UCR departamental. En tanto Sebastián Laborde de Vicuña Mackenna será el vicepresidente primero y Laila Saffadi, vicepresidenta segunda.
Parte de la dirigencia regional habría manifestado su descontento ante la persistencia de Beltramone en la conducción del partido y la “gota que rebalsó el vaso” habría sido su presencia en el último encuentro celebrado en Vicuña Mackenna (“Radicales mirando al futuro”). Aquella instancia convocaba a los boinas blanca a mostrar un radicalismo unido y con “hambre de gloria” para las próximas elecciones provinciales y nacionales. Sin embargo, a nivel departamental, quedaron expuestas algunas fisuras de aquellos que no acordaban con la impronta del encuentro y aludían a que “carecía de renovación” ante la predominancia de dirigentes históricos y poca participación juvenil. Cabe recordar que algunos sectores de la Juventud Radical y UCR Diversidad emitieron un comunicado explicando su ausencia por no haber sido convocados en la organización de dicha cumbre.
La salida de Beltramone de la conducción del partido en el departamento rompería con cierta lógica que se aplicó en los últimos años a la hora de elegir las autoridades. Últimamente se daba una especie de “rotación” en la cual la presidencia del departamento se “turnaba” entre algún miembro de la UCR Río Cuarto y algún integrante del Foro de Intendentes Radicales. En la última renovación de autoridades no hubo interna y se acordó lista de unidad. La conducción había quedado en manos de los miembros del foro pertenecientes al departamento Río Cuarto (algunos de ellos se supieron referenciar en Ramón Mestre y acompañaron su candidatura a gobernador).
El mapa en la región
El hecho de que la presidencia del departamento ya no sea ocupada por otro miembro del foro de Intendentes dejaría a este espacio relegado de la conducción de un departamento importante para la construcción venidera. Más allá de los hechos que derivaron en la renuncia de Beltramone (de índole judicial), desde el año pasado se advertiría una pérdida de peso político por parte de miembros del foro en el departamento Río Cuarto. Los resultados de las PASO legislativas habrían contribuido a elevar el perfil de algunos dirigentes en detrimento de la imagen de otros (ex mestristas). En ese sentido, la ausencia de algunos núcleos en el último encuentro en Vicuña Mackenna respondería a ciertos desacuerdos con los anfitriones del evento y los dirigentes que se encontraban en primera fila (varios de ellos eran intendentes de la región).
En ediciones anteriores, Alfil analizaba una de las últimas imágenes que se vio en la Casa Radical: la presencia de prácticamente todos los núcleos del radicalismo riocuartense unidos en rechazo al pliego licitatorio de transporte que se aprobó en el Concejo Deliberante. En su afán de disipar algunos rumores de quiebre, la dirigencia local atinó a mostrarse unida y bajo la premisa de trabajar desde el seno partidario en relación a problemáticas relevantes para la ciudad (previamente habían realizado un plenario en su sede partidaria para plantear alternativas al pliego propuesto por el llamosismo).
Pero no todo es color de rosas y aunque en el plano más abierto haya sonrisas y abrazos entre los dirigentes, las pretensiones de volver a gobernar la Municipalidad en el 2024 podrían volver a generar algunas fricciones. Desde el partido insisten en que seguramente se dirimirán las candidaturas a partir de una interna y que luego “todos trabajarán para un mismo equipo”. No obstante, la búsqueda de protagonismo de varios dirigentes en el último tiempo y la ya ¿desestimada? alianza entre Gonzalo Luján y Gabriel Abrile anticiparían una interna “brava” para los próximos comicios municipales.