Provincia pide más gestión y menos rosca

Por Gabriel Marclé

“Todavía estamos lejos”, declaraba un nombre fuerte del oficialismo provincial al referirse a las elecciones legislativas que se avecinan. Sus expresiones denotaban una sensación de hastío generada por la inminente fecha electoral y las versiones que surgen en torno al particular contexto político. Mientras muchos demuestran ansiedad por conocer cómo se confeccionarán las listas, la mesa estratégica del cordobesismo lanzó un contundente mensaje a los intendentes del PJ: “Más gestión y menos rosca”.

Es sabido que los trascendidos y rumores del armado pre-electoral no se toman vacaciones. Esta situación ha generado cierta incomodidad en el oficialismo provincial, teniendo en cuenta que los ingredientes del caldo legislativo todavía están en “mise en place”. Un asesor cercano al gobernador cree que, más allá del apremiante contexto actual, “la decisión se tomará más cerca de las elecciones”.

Por esta razón, la orden del gobernador apunta directamente a mantener un buen rendimiento en cada una de las gestiones municipales que responden a su espacio. Así como en capital y otros municipios, Río Cuarto fue comandado a cumplir con el plan central y Juan Manuel Llamosas solo tiene un objetivo en mente: “No hay futuro si no hay presente”. Así se lo transmite a sus funcionarios, con un tono heredado del gobernador Juan Schiaretti.

¿Qué quiere decir Llamosas con esto? Básicamente, que sus hombres y mujeres se centren en la función pública municipal y alejen cualquier tipo de tentación externa. Es sabido que, camino a las legislativas, comienzan a sonar algunos nombres del peronismo local. Sin embargo, esto no forma parte de la agenda principal del jefe municipal. “No hay discusión de candidatos”, aseguran desde el Palacio de Mojica, a lo que agregan: “Si sale algún nombre, lo definirá el intendente. Es el único en la Municipalidad que tiene línea directa con el gobernador”.

La rosca

“Cada cosa en su lugar”, dicen desde Córdoba. El itinerario electoral de este año tiene muchos capítulos por delante, pero la incidencia de una interna regional o algún exabrupto en ciudades como Río Cuarto “es insignificante”, califican desde la mesa chica provincial. En este sentido, la renuncia de una funcionaria delasotista del gabinete municipal o las internas de poder dentro del PJ riocuartense no son la mayor preocupación.

La situación que atravesó la Municipalidad con una de las referentes de La Militante puso al descubierto que el peronismo se encuentra tironeado desde varios lados, lo que lleva a pensar en las intenciones que se ocultan detrás de estos desatinos. Pero también surgen nombres como el de Mauricio Dova, actual tribuno de cuentas, quien desde hace tiempo viene poniendo en marcha una militancia propia con la que busca impulso hacia otras esferas de poder.

Más allá de las órdenes impartidas, primero por Schiaretti y después por Llamosas, algunos personajes del oficialismo comenzaron a dar señales de individualismo. “Hay gente con agenda propia”, indicaba un integrante de la alianza del PJ. Ahora, los nombres vinculados a esas cuestiones deberán aceptar las consecuencias de salirse del plan, según advierten en la mesa schiarettista.

“Hay jugadores de todo tipo, pero el peronismo de Córdoba está bastante organizado”, reflexionan desde El Panal, atentos a los revires de estos actores. Está claro que muchos aspiran a integrar las listas que se conformarán de cara a las legislativas, pero el gobernador tiene la última palabra. Allí es donde a la mesa estratégica le cuesta confiar nombres que nunca pudieron proyectarse más allá de los límites geográficos de Río Cuarto.

“Se la ponen difícil al intendente, que busca gestionar”, indicaba el referente peronista sobre los que priorizan el orgullo propio por sobre la gestión grupal. A esto se refieren los propulsores del proyecto cordobesista cuando hablan de la rosca. Para ellos, es necesario quitar de lado los apuros y “delirios” de quienes buscan subir de rango en soledad.

Una previa compleja

Mientras la gestión del intendente se mantenga en un buen rumbo, Schiaretti cargará con una inseguridad menos. La mochila de complejidades viene cargada desde hace tiempo, pero la pandemia sumó aún más peso. En medio de esto, algunos alientan una disputa entre Provincia y Nación que, según sostienen desde dentro del “Panal”, parece lejos de estallar.

Más allá de la imposibilidad de obviar el sentir anti-k que predomina, aseguran que la relación es “muy buena”. Hay diferencias, pero son más los proyectos compartidos, lo que los ha llevado a pensar que quienes alientan ese tramo de diferencias son los integrantes de la oposición. Juntos por el Cambio y su versión local tienen su propia rosca, esa que agita a las masas para que relacionen a Schiaretti con el presidente Fernández, tanto para lo malo como para lo bueno.

Algunos asesores del oficialismo provincial sugieren que la oposición busca sacar rédito de la polarización para atraer a los votantes que integran el costado más recalcitrante del público anti-k. Pero también alientan un discurso de división y pelea que termina siendo perjudicial para el Gobierno de Córdoba. Las encuestas encargadas por El Panal revelan que una parte importante de la población no quiere que haya fuertes divisiones entre Córdoba y la Casa Rosada, aunque aclaran: “Tampoco quieren que estemos de novios”.

Pero la incertidumbre seguirá imponiéndose de aquí hasta que se renueven las bancas del legislativo, es por eso que los adeptos al gobernador llaman a trabajar y reducir la ansiedad, porque todavía queda mucho en juego. Un ejemplo de esto se observa en torno al comienzo de clases, tema que domina la agenda actual. El gobernador Schiaretti sigue una línea política que, más allá del convencimiento, no les garantiza resultados positivos. Puede ocurrir que, una vez más, la pandemia corra hacia adelante los logros y traiga inconvenientes que obliguen a frenar la flexibilización.

Por esta y otras razones, no es momento para nombres ni listas. Todos esos elementos suman entropía al final del proceso, pero integran una buena parte de los efectos a corto plazo en los que sin duda también están los armados de las legislativas. Lo que le interesa a Schiaretti y sus comandados es el llamado “juego largo”. En pocas palabras, las elecciones de octubre serán un partido más dentro del campeonato que finaliza en 2023, cuando los cordobeses elijan al próximo gobernador.

 

 

Intervenciones en los espacios públicos

La Secretaría de Servicios Públicos continúa con el plan de limpieza, desmalezado y mantenimiento de los espacios públicos en diferentes sectores de toda la ciudad. Las tareas se realizan con mayor frecuencia debido al aumento de las precipitaciones en el periodo estival, además de mejorar la calidad de los espacios de esparcimiento en beneficio de la ciudadanía.

Los trabajos tienen como puntos de intervención al Puente Filloy y Bv. Río Grande, y la Costanera Sur entre los puentes Islas Malvinas y Filloy. También se realizan tareas de mantenimiento en el Parque Sarmiento y el Lago Villa Dalcar.