Impuesto a las grandes fortunas: descontento empresario y posibles juicios

En el mundo de los negocios de Córdoba el impuesto a las grandes fortunas que, al cierre de esta edición se aprestaba a aprobar Diputados, cayó tan mal como en el resto de los empresarios del país. Para el gobernador Juan Schiaretti –de buen vínculo con los empresarios- también pesará la decisión de que sus cuatro diputados apoyen el polémico (no sólo desde lo político sino desde lo jurídico) el proyecto del kirchnerismo.

A los comunicados que vienen emitiendo las centrales empresarias y del campo, ayer se sumó el de la Bolsa de Comercio de Córdoba que plantea que con el “aporte solidario” se ha duplicado la imposición que “ya se aplicó con el impuesto a bienes personales, pero en este gravamen se incluye, además, las tenencias de acciones empresarias, propiedades y bienes productivos que no son líquidos. Con lo cual, una gran proporción del sector productivo incluido el agropecuario deberán pagarlo. Resulta contradictorio y una falta de oportunidad, debilitar al sector productivo en este particular momento, en el cual, se lo necesita vital para iniciar el proceso de recuperación”.

“Consideramos que esta decisión, como otras medidas que adopta el gobierno, conspiran de manera sistemática contra la indispensable generación de confianza, imprescindible para una recuperación consistente de la economía”, agrega el texto.

Los votos de los schiarettistas Carlos Gutiérrez, Claudia Márquez, Alejandra Vigo y Paulo Cassinerio –como ya se sabe- son claves en Diputados donde el oficialismo no se maneja con la comodidad que tiene en el Senado. El argumento de que en otros países aumentó la presión fiscal por la pandemia y la cuarentena es rebatido desde diferentes sectores porque la presión tributaria argentina es más alta que la de naciones de la OCDE y, además, el impuesto implica una doble imposición que puede derivar en una catarata de presentaciones judiciales.

Según datos de la Afip, con la sanción del aporte extraordinario, se recaudarían más de $ 307.000 millones, es decir, cerca de un punto porcentual del PBI. La iniciativa alcanza a aquellas personas físicas que posean una riqueza declarada superior a los $ 200 millones, con una alícuota del 2%, que incrementa a medida que el patrimonio es mayor, llegando al 3,5% para los patrimonios de más de $ 3000 millones.

Establece que, aquellas personas humanas que tengan bienes declarados en el exterior deberán pagar un diferencial del 50% en cada escala. Y, si deciden repatriar el 30% de sus tenencias financieras en el exterior, quedarán exceptuados de ese diferencial y serán igualados con el resto de los aportantes.

Si bien en un comienzo se estimaba que el aporte alcanzaría a 12.000 personas, finalmente la Afip indicó que serán 9298 los contribuyentes de este aporte. De acuerdo a las estimaciones arrojadas por el Frente de Todos, alrededor de la mitad de las personas alcanzadas por este aporte tienen entre $ 200 a $ 400 millones.

El diputado del Frente de Todos y presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Carlos Heller, abrió el debate planteando que la iniciativa «no va contra nadie» y sostuvo que «no es una confrontación entre los que más tienen y los que menos tienen». Agregó: «Este es un proyecto que no va contra nadie. No está pensado para personas determinadas, por eso le pusimos solidario porque estamos ante una situación de emergencia y es por única vez».

Por su lado, el vicepresidente de la Comisión de Presupuesto, el diputado el PRO, Luciano Laspina, justificó la negativa de Juntos por el Cambio a acompañar la iniciativa al sostener que «la emergencia no habilita a violentar los principios de la Constitución Nacional».

El cordobés Mario Negri “Nosotros no armamos, no planificamos ni damos golpes por atrás”, dijo al inicio de la sesión. Fue en respuesta a una acusación del kirchnerismo por las cuestiones de privilegio planteadas por el interbloque de Juntos por el Cambio contra Sergio Massa, titular de Diputados.

“Nosotros conversamos de frente. Quiero decir que no vamos a hacer lo que nos hacían ustedes, cuando había 20 cuestiones de privilegio por sesión, 30 pedidos de apartamiento de reglamento por sesión. Guarda con decir que no, porque se iban al humo del presidente de la Cámara, saltaban porque decían que se les impedía la palabra”, aclaró Negri.

“Nosotros queremos debatir lo que se va a debatir hoy (el impuesto a la riqueza es el principal tema de la agenda). No tenemos nada que esconder, tenemos sanas diferencias, tenemos una visión distinta de cómo resolver las cuestiones de la Argentina. Porque nos hacemos cargo del pasado, no somos como ustedes que siempre están llegando, como si no tuvieran nada que ver con lo que ocurrió en la Argentina. Así no se enfrentan los problemas”.