Por Alejandro Moreno
La Junta Electoral de la Unión Cívica Radical le pidió al titular del COE (Centro de Operaciones de Emergencia), Juan Ledesma, una reunión para llegar a un acuerdo sobre los protocolos sanitarios a aplicar para las elecciones internas del 6 de diciembre.
La Junta, que ahora es presidida por el negrista Horacio Santucho (en lugar del mestrista Ramón Ortega), solicitó a Ledesma sentarse a conversar sobre “los protocolos sanitarios y procedimientos necesarios para poder llevar adelante, con todos los recaudos necesarios, las próximas elecciones internas de la UCR”.
Los radicales agregaron que “el presente pedido se realiza teniendo en cuenta la situación actual y las previsiones futuras, ante la pandemia covid-19, tomando como referencia para ello los protocolos oportunamente fijados para la realización de las elecciones generales para autoridades municipales de la ciudad de Río Cuarto”.
“Con los protocolos dictados por el COE, esta Junta Electoral podrá dar previsibilidad al acto eleccionario y avanzar con todos los actos preelectorales, estando preparados con el tiempo prudente, para el normal desarrollo de una de las actividades primarias y básicas del sistema democrático de gobierno”, completaron el negrista Santucho y otros dos miembros de la Junta, el deloredista Abelardo Maliandi y el ex mestrista Adrián Casati. No suscribieron el ex presidente Ramón Ortega y Cecilia Aro, ambos mestristas.
El cronograma electoral de la UCR prevé elecciones el 6 de diciembre, para renovar las autoridades partidarias, y el 20 de ese mes como fecha de asunción. El recambio debía hacerse en septiembre, y entonces las elecciones en agosto, pero todo ello debió postergarse por la cuarentena.
Diciembre parecía que quedaba suficientemente lejos del covid-19, pero las estimaciones que indican que el pico se produciría en octubre colocan entre signos de interrogación el calendario electoral partidario.
Para colmo, el protocolo riocuartense no parece alcanzar para garantizar las elecciones que fueron convocadas (ya como una prórroga) para el 27 de septiembre. Ahora, se baraja como fecha alternativa el 29 de noviembre para votar intendente, apenas una semana antes del domingo en que los radicales quieren elegir sus autoridades para el período 2020-2022.
En sectores opositores a la conducción mestrista sospechan y comentan, por lo bajo, que al oficialismo podría resultarle muy adecuada una nueva postergación, que llevaría las elecciones internas para el 2021, lo cual complicaría mucho una convocatoria a las urnas justo cuando aparecerían en el horizonte las PASO y los comicios nacionales.
Por eso mismo, es un subrayado en la carta de la Junta Electoral que el pedido para aprobar un protocolo y dar mayor certeza a las internas lleve las firmas de los miembros no mestristas, y que le falte la de los mestristas.
El negrismo, el deloredismo y el ex mestrismo (las pertenencias partidarias de los que suscribieron la carta al COE) integran junto al angelocismo la Liga Sumar, que se prepara para enfrentar al mestrismo en las internas.