Por Federico Jelic
Más allá de las responsabilidades y los méritos de cada gestión a quien corresponda según la circunstancia, en el caso de Medardo Ligorria hay un nuevo motivo de orgullo, justo en tiempos de retirada, donde su proceso figura en receso como presidente de la Agencia Córdoba Deportes. Es que el estadio provincial “Mario Alberto Kempes” consiguió una distinción simbólica en su naturaleza de internacional, dando un salto más cruzando las fronteras, al ser elegido por la Conmebol como sede de la final de la Copa Sudamericana 2020. El “Lomo”, presidente de la Agencia Córdoba Deportes hasta diciembre, rematará su paso por la función pública con un partido definitorio de índole internacional, superando ya la condición de sede de certámenes locales, como dejando un antecedente para jerarquizar definitivamente el máximo coliseo cordobés.
Dentro de la ola de rumores que iban desde las versiones de que su gobierno no llegaría al final del ciclo y con aspirantes a suceder su trono a la orden del día, Ligorria pudo estabilizarse en su silla y dejar como frutilla del postre a Córdoba ya como una seria opción de sede a nivel continental. En un año delicado, donde fue cuestionado por muchos contrincantes y respaldado desde Casa de Gobierno, transitó su ciclo frente al ente deportivo gubernamental con vaivenes pero con la misma tesitura de su anterior proceso.
La designación no sorprendió demasiado teniendo en cuenta que ya el Kempes había sentado precedentes de organización, aforo (57 mil espectadores) y ubicación como para ser tenido en cuenta siempre, sea por AFA por la Selección Argentina y ahora también por Conmebol. Este 2019 albergó la final de la Copa de la Superliga entre Boca Juniors y Tigre, sin sobresaltos en la organización. Y por Eliminatorias también dejó su sello.
Ligorria destacó que presentó su solicitud para recibir tanto a la Sudamericana como a la Copa Libertadores, como privilegio supremo, aunque el mítico Maracaná de Río de Janeiro le ganó la pulseada. Pavada de contrincante. Es decir, el ex Chateau Carreras ya es una alternativa fiable internacional y su gran logro es ser destacado por encima de otros escenarios nacionales. De hecho, en el camino para llegar a recibir a la definición por el título en la Sudamericana (con fecha para el 7 de noviembre de 2020) tuvo compulsa con estadios brasileños y solamente de Argentina, con el estadio Ciudad de La Plata (mal llamado “Único” por la prensa). Es decir, superó en consideración al escenario de la capital bonaerense, y se asienta como la mejor localía del país, sin contar las sedes de los que clubes.
La traducción y lectura de esta situación indica que está por encima del “José María Minella” de Mar del Plata, al Bicentenario de San Juan y al “Malvinas Argentinas” de Mendoza, con amplitud, ya que ni siquiera estos últimos fueron tenidos en cuenta. Pero en el círculo íntimo, con anclaje local, tiene otra interpretación más: dentro de este ineludible hecho, invita a entender que ser el primer estadio en prioridad de Argentina es el verdadero triunfo de Ligorria, del gobierno Provincial y la Agencia Córdoba Deportes. Y como postre, hay más certezas consolidadas, ya que a su vez fue aprobada también por Conmebol y AFA para que forme parte como sede de la Copa América 2020, torneo organizado conjuntamente por Argentina y Colombia.
Todo esto pudo cristalizarse con la gran remodelación y ampliación de sus tribunas, proyecto que puso su piedra basal en la primera gestión de Ligorria en la Agencia (de 2007 a 2010) y que con la administración de Emeterio Rufino Farías pudo inaugurar en la Copa América 2011. Ligorria, hombre del riñón del gobernador Juan Schiaretti (en sus dos ciclos lo tuvo en cuenta para la función de estar en la dirección de la dependencia provincial deportiva), se incorporó a la presidencia otra vez en 2016 tras la salida de Oscar Dertycia, ex delantero de Instituto, quien dejó su cargo tras las críticas vertidas sobre el irregular estado del campo de juego del Kempes.
Igual tuvo que soportar críticas y tormentas. En este último tramo los trascendidos hablaron de una renuncia inminente a una destitución ya firmada. Incluso hubo potenciales nombres a sucederlo: Sergio Flores, director de deportes de la Secretaría de Equidad y Promoción de empleo, célebre por su campaña efectiva para homenajear al campeón del mundo José Luis Cuciuffo con su nombre en un paseo en la “Plaza de los burros”, en barrio San Martín. El otro apellido en cuestión también es ladero de Schiaretti: nada menos que el ex basquetbolista múltiple campeón con Atenas, Oscar “Pichi” Campana, quien fuera vice del “Gringo” y candidato a intendente.
“Lomo” en retirada
En entrevistas mediáticas, Ligorria remarcó que se irá de cargo a fin de año. El nombre de su sucesor aún no definido. Mientras algunos hablan de una tregua con El Panal para no irse anticipadamente, otros destacan su labor de gestión para sobrevivir a la crisis. Contará con el orgullo de haber logrado la remodelación de la superficie del Kempes con desagües subterráneos como obra realizada por primera vez desde la construcción del estadio en 1978, y de haber alojado finales y partidos cruciales de Copa Argentina, además de haber sido valorizada por Conmebol, tras el partido de Talleres contra Sao Paulo de Brasil. Ni hablar del primer circuito internacional de Tenis, con el “Córdoba Open”. Por esos alcances, hoy el máximo coliseo cordobés será sede de la final de la Sudamericana 2020 por primera vez, soñando con la chance de que en unos años, lo pueda ser también del máximo trofeo continental.