Néstor Chavarría, ¿nuevo expectable para la CGT Regional?

En el Centro Cívico empieza a sonar el nombre del secretario general de la Ucora, que mantiene muy buenas relaciones con Juan Schiaretti, como posible sucesor de José “Pepe” Pihen al frente de la CGT.

Por Felipe Osman
fosman@diarioalfil.com.ar

La campaña rumbo a las elecciones nacionales de octubre ha obrado como un verdadero tembladeral en el escenario del sindicalismo de Córdoba. Antes de que se cerraran las listas para las primarias, Pablo Chacón era un expectable para las vecinas elecciones de la CGT Regional Córdoba por las buenas relaciones que históricamente ha cultivado con el peronismo, y particularmente con El Panal. Después del cierre de la lista del Frente de Todos, con Chacón ocupando el tercer lugar de la boleta, no sólo su relación con el Centro Cívico quedó diluida sino que además Ilda Bustos (Gráfi cos) y Franco Saillen (Surrbac) no dudaron en denostar al flamante candidato en durísimos términos. Lógico, terminó en el lugar que ellos añoraban.
Antes del cierre de listas, si bien en el ceno de la propia CGT existían tensiones ente José Pihen e Ilda Bustos por haber quedado esta marginada de la lista legislativa que Hacemos por Córdoba llevó a las elecciones del 12 de mayo, estas diferencia habían producido una fisura dentro de la central, como si sucedería semanas después. Luego, comenzada la campaña nacional, Bustos motorizó el surgimiento del Movimiento Sindical para la Justicia Social y el Trabajo, acompañada por 14 gremios, entre los cuales destacan la Asociación Bancaria, liderada por Raúl Ferro, y el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (S.T.I.A.), que comanda Héctor Morcillo. Finalmente, el naufragio de la otra central, la CGT Rodríguez Peña, es ampliamente conocido. Tras la encarcelación de Mauricio Saillen y Pascual Catrambone en el marco de una investigación que los sindica como sospechosos de los delitos de lavado de activos y usura calificada, y atravesando Gabriel Suárez (Luz y Fuerza) una investigación penal muy similar, la centrar “Nacional y Popular” parece haber quedado virtualmente acéfala. Así las cosas puede decirse que poco y nada queda del mapa del sindicalismo local que veíamos hace tres meses. El cierre de listas, la campaña y el avance de causas judiciales radicadas en la Justicia Federal han sacudido el tablero y no es tarea sencilla ahora saber el lugar que ocupa cada pieza. Las elecciones de la CGT se avecinan. Y programadas para fines de noviembre, contaban hasta ahora con tres postulantes. En primer lugar, el “actual campeón”, Pihen. Se descuenta que el secretario general del SEP aspira a continuar al mando de la central y cuenta para ello con el respaldo de una gran parte de los sindicatos que la integran. Ha ensayado además un acercamiento con Bustos, pero -de momentono parece haber habido buenos resultados. También ha admitido su interés en controlar los hilos de la CGT Regional Rubén Urbano, titular de la Unión Obrera Metalúrgica, que cuenta con el respaldo de Cachón. Sin embargo, el que tal vez fuera el principal capital del líder de Agec para aspirar a ungir a un delfín propio en la central –su buena relación con el Centro Cívico- ha quedado licuado. El tercer candidato viene de un espacio gremial relativamente nuevo. Las 62 Organizaciones que comandan Sergio Fittipaldi y Ricardo Moreno ha expresado sus intenciones de llevar al secretario general del Soelsac a la CGT. Esta agrupación de sindicatos cultiva buenas relaciones con el oficialismo y se muestra trabajando para la campaña que Hacemos por Córdoba ha diseñado para impulsar la boleta corta. Pero estos contendientes empiezan a percibir que un nuevo retador busca subirse a la pulseada. En las últimas semanas el nombre de Néstor Chavarría ha empezado a sonar en los pasillos de El Panal. El secretario general de la UOCRA cultiva muy buenas relaciones con el gobernador Juan Schiaretti, y muchos destacan que su sindicato ha sido el primer beneficiario del ambicioso plan de obra pública en el que el mandatario provincial asentó la campaña que lo llevó a cosechar el 57 por ciento de los votos en las elecciones provinciales de mayo.