Hernando será el presidente de Daspu

Hernando es el actual secretario general de Odontología y el hombre más cercano a la decana Mirta Lutri. Esta unidad académica fue la más gananciosa en el reparto porque la Secretaría de Salud será para Hugo Pizzi, también de esa Facultad.

Por Gabriel Osman
gosman@diarioalfil.com.ar

Luis Hernando presidirá la Daspu.

Después de semanas de negociaciones, los principales sectores políticos representados en el Consejo Directivo de la Daspu y también los referentes del oficialismo que gobierna la UNC, lograron llegar a un acuerdo que involucra a siete de los nueve consejeros de la obra social en torno al nombre de Luis Hernando para la presidencia, además de consensuar los tres nombres para las secretarías de Salud, Organización y Administración.
Hernando es el actual secretario general de Odontología y el hombre más cercano a la decana Mirta Lutri. Esta unidad académica fue la más gananciosa en el reparto porque la Secretaría de Salud será para Hugo Pizzi, también de esa Facultad. Este es un dato incontrastable pero no el único. Por un lado, Hugo Pizzi es el hermano de Rogelio Pizzi, titular de Médicas. “Es el único peronista en la familia”, suele decir el decano, radical y, desde joven, militante de la Franja Morada. El factor restante que balancea el “bocado del león” que se llevó Odontología es que la obra social tiene una conducción colegiada, algo que le fue remarcado ayer más de una vez a Hernando, un hombre razonable pero de carácter fuerte.
Donde no habrá cambios es en las dos restantes secretarías. En Organización seguirá Luis Ambrosini (MUN) y en Administración, un hombre de la Facultad de Ciencias Económicas, Ricardo Castelo. La continuidad de estos dos funcionarios es una ratificación de la confianza en ellos.
La elección del presidente de la Daspu siempre ha sido compleja y muy disputada. Su presupuesto es más grande que la mayoría de las 15 unidades académicas con que cuenta la UNC y, adicionalmente, tiene mucha autonomía en una universidad ya autónoma. Las relaciones de fuerza entre docentes y no docentes son bien distintas a la que existe en los órganos de gobierno de la casa de estudio. En estos, los sindicalizados en la Gremial San Martín tienen una participación marginal (una de las 18 bancas que conforman los Consejos Directivos y dos en el medio centenar que componen el Consejo Superior), mientras que en la conducción de la Daspu ambos claustros tienen 4 bancas cada uno (el restante es de los jubilados).
Esta circunstancia no es una anécdota precisamente. Tampoco la intensa vida interna que tiene la Gremial San Martín (a veces también tumultuosa) y el entrelazamiento de las alternativas en el sindicato y en la obra social. En cualquier caso, los no docentes nunca han presionado con este poder más allá de lo razonable. Nunca un no docente la presidió, y en este caso promediaron sus decisiones con los docentes y colocaron en la presidencia a un hombre formado en las ciencias de la salud, algo que luce como pertinente.
La masa crítica de votos se logró con el concurso de los no docentes César Toledo (Cambiemos), César Yannover (MUN), Inés Pastorino (MUN) y Maximiliano Osman (Rogelio Pizzi-Carlos Vallejos); los docentes Leandro Carbelo (Agronomía) y Luis Hernando (Odontología); más el jubilado Hugo Centurión (Encuentro No Docente aliado del MUN).
Son siete votos sobre un cuerpo de nueve, más que suficiente. No se sabe qué postura adoptarán los dos consejeros que tienen sentado en el Consejo Directivo la decana de Psicología, Patricia Altamirano, y el gremio Adiuc. Esta duda se despejará hoy antes del mediodía cuando se realice una sesión extraordinaria que refrendará los acuerdos de la víspera.