La media sanción al proyecto que despenaliza el aborto en la Cámara de Diputados mostró la fisura de cambiemos. Un legislador nacional por Córdoba brindó algunos elementos al periodista, minutos después del histórico debate.
Diputado macrista: Las relaciones en Cambiemos han quedado sensibles. No se lo voy a negar.
Periodista: La foto de sus pares a favor de la interrupción del embarazo en la explanada del Congreso pasó a ser una apostilla.
D.M.: Claro. La votación venía encaminada por el “no” pero operaciones de último momento complicaron la cosa. Los radicales Ernesto Sanz y Ricardo Gil Lavedra tuvieron una actuación determinante para inclinar la balanza. El macrista Nicolás Massot, frente a esto, empezó a recordarles a los diputados que el presidente no estaba de acuerdo con la despenalización.
P.: Pese a que sólo se limitó a habilitar el debate.
D.M.: Exacto. Pero el problema es que los miembros de Cambiemos cruzaron algunos límites discursivos. Algunas intervenciones fueron demasiado arriba.
P.: Era esperable. También se vivió un tenso momento con Lilita Carrió amenazando con romper; o el de Emilio Monzó pidiéndole a Javier Pretto que reste dos votos a 131.
D.M.: Datos de color. Pero en Cambiemos Córdoba la foto en distinta. Varios diputados cruzaron llamados para reconocer los aciertos en el debate. La radical Brenda Austin, militante por la despenalización, fue muy felicitada pese a que sólo cinco diputados en total apoyaron.