Saillen llama a paro (solo y a destiempo)

El líder del Surrbac y la menguada central “Nacional y Popular Rodríguez Peña” convocó a coordinar en la provincia a una jornada de paro y movilización, y buscar su réplica a nivel nacional. Pero su llamada no ha encontrado respuesta en el gremialismo cordobés, y un reclamo en contra del “tarifazo” luce anacrónico ante los hechos consumados.

Por Felipe Osman

Mauricio Saillen, secretario general del Surrbac (Sindicato Único de Recolectores de Residuos y Barrido de Córdoba) y de la “CGT Rodríguez Peña”, intentará recuperar el protagonismo que durante el último año ha perdido en el gremialismo cordobés, llamando a una jornada de paro y movilización a la que, preventivamente, ha preferido no poner fecha.
Recuérdese que el líder sindical viene de una seguidilla de traspiés que comenzó promediando el año pasado, cuando decidió prestar su apoyo al (terriblemente) impopular paro de la UTA, que mantuvo paralizada a la ciudad durante nueve días, ocho de ellos ilegalmente, dado que el Ministerio de Trabajo de la Provincia ya había dictado la conciliación obligatoria.
Esta medida, que en un primer momento contó con el respaldo de varios referentes del sindicalismo local (peronista), empezó a perder adhesiones al extenderse en el tiempo. Finalmente, Saillen fue el último en despegarse de la protesta arengada por los delegados trotkistas de la UTA (Marcelo Marín y Sonia Baes), cuando el resto del sindicalismo local ya había decidido dejar de hacerle el juego a la izquierda, y a un reclamo que terminaría cayendo por su propio peso.
Después de haber quedado “pedaleando en el aire” por su apoyo a la UTA, tomaron estado público denuncias de manejos cuasi mafiosos en el Surrbac y causas judiciales que tocaban a integrantes de la conducción del sindicato. Y, tras cartón, el surgimiento de otra central obrera, las “62 Organizaciones”, menguó a la CGT “Nacional y Popular” conducida por Saillen.
Ahora el referente de los recolectores ha decidido salir a buscar escena con un llamado a coordinar una jornada de paro y movilización, pero su llamada no parece haber encontrado ninguna respuesta en el gremialismo local.
Extraña que una convocatoria de esta escala, que pretende incluso encontrar una réplica a nivel nacional, no sea coordinada previamente con otras centrales o, al menos, con una porción importante de los sindicatos cordobeses. Alguien podría incluso llegar a pensar que Saillen decidió armar todo por las redes sociales, sin que nadie decida aún confirmar su asistencia al “evento”.
Y extraña, además, lo extemporáneo del reclamo, que pretende rechazar el “tarifazo”. Más oportuna hubiera sido una convocatoria para respaldar la sanción de la ley promovida por el peronismo y sus afines, antes que otra que llega después del veto presidencial, con los hechos ya consumados.
Dadas estas circunstancias, la llamada del líder de la CGT “Nacional y Popular” parece más motivada por un interés de acaparar la atención, que como un intento serio y consensuado por articular una jornada de protesta en rechazo a las medidas adoptadas por el gobierno nacional.