Cinco años al 2,7% anual para alcanzar el ingreso medio ruso

En 15 años de una mejora promedio anual del PBI de 3,4% todavía habría problemas de déficit habitacional y pobreza estructural. La indigencia entre los chicos es el doble de la media y 20 veces más que entre los adultos mayores.

Por Gabriela Origlia

La indigencia entre los menores de 14 años en el país es doble que la media y 20 veces más alta que entre los mayores de 64, lo que marca la necesidad de tener una política “de foco, activa, directa y específica” para eliminarla ya que –si no se resuelve- “se van construyendo nuevos problemas”. El problema es una consecuencia de los ciclos macro. Por ejemplo, Argentina -creciendo al 2,7% promedio anual- está a cinco años de alcanzar el actual ingreso per cápita ruso.
El dato se desprende de un trabajo del Instituto de Economía de la Bolsa de Comercio de Córdoba, dirigido por Diego Dequino y se fundamenta en los últimos datos oficiales correspondientes al primer semestre de este año. En ese período el Indec midió 28,6% de pobreza y 6,2% de indigencia 6,2 en 31 conglomerados de más de 80.000 habitantes en el país.
Los economistas de la Bolsa –sobre esas mediciones efectivamente realizadas- señalaron que de las 27,5 millones de personas, 7,8 millones son pobres y 1,7 millones son indigentes. De ese segundo global, 20.000 son adultos mayores; 540.000 tienen entre 30 y 64 años; 500.000 entre 15 y 29 y los niños de menos de 14 años suman 645.000.
Si la tendencia de reducción de pobreza e indigencia registrada entre el segundo semestre de 2016 y el primer de este año se sostiene, en seis años la pobreza abarcaría a 4,2 millones de personas (la caída sería de 14,3 puntos porcentuales), los indigentes pasarían a 900.000 (una baja de 3,1 puntos porcentuales) y los hogares con necesidades básicas insatisfechas se reducirían 2,9 puntos porcentuales (650.000).
Si esos niveles de crecimiento se mantuvieran 15 años –en la Argentina un período de “largo plazo”- la indigencia bajaría 5,1 puntos porcentuales y en la infancia bajaría 82%, quedando unos 112.000 chicos en esa condición. Sin embargo, 325.000 adolescentes/adultos provendrán de una infancia en condiciones de indigencia, un “hipoteca” de futuro.
El análisis y las proyecciones realizadas muestran, según Dequino, que el “derrame no alcanzaría ni en velocidad ni en volumen” y que hay que avanzar en una política focalizada. En esa línea, señaló la mejor tutela que se evidencia en los adultos mayores puede ser “un efecto no buscado” de las decisiones previsionales tomadas en los últimos años.

Crecer y ordenar indicadores
Si la Argentina, durante 15 años, creciera a una media anual del 2,7% en el 2021 alcanzaría el PBI per cápita de Rusia (23.150 dólares) y en 2032 el de Grecia (26.800 dólares). Hoy el de Argentina es de 20.300 dólares.
Si la tasa de crecimiento, en cambio, fuera de 5,5% promedio se acortaría al 2019 el llegar a un nivel como el ruso y al 2023 el griego; los 30.600 dólares per cápita por año de Portugal se alcanzarían en 2027; los 36.300 dólares españoles en 2029 y los 41.450 dólares franceses en 2032.
¿Por qué esos parámetros de crecimiento? Porque fueron tomados de dos recuperaciones registradas por Argentina entre 1993 y hoy (lapso en que hubo siete recesiones y una depresión). Entre 1993 y 1999 el crecimiento del PBI fue de una media de 2,7% y entre 2004 y 2010 del 5,5% promedio por año.
En ese marco, la Bolsa estima que una tendencia posible hacia el futuro es una media de 3,4% anual. Si ese nivel se sostuviera durante 15 años todavía el país tendría problemas de pobreza estructural (alrededor de 5%) y déficit habitacional (1,3 millones de unidades). En ese período –y con esa tasa de evolución- el déficit fiscal se corregiría hacia el 2030. En el 2032 habría un superávit de 3,6%.
Así Argentina necesita crecer al menos durante 15 años a una tasa 2,5 veces más rápida que la población; ese nivel es imprescindible para profundizar el desarrollo y mejorar el bienestar y, aun así, para determinados segmentos se requerirían medidas particulares.
Este año, aportó Aquino, ya el rebote de la economía permitió recuperar la caída de 2016. “Toda mejora del último trimestre será crecimiento neto”.
Respecto del tipo de cambio, el Instituto señaló que hoy está 24% por debajo de la media histórica (23,05 pesos a valores actuales) y cuatro puntos porcentuales menos que la zona de confort (18,44 pesos). Ese es uno de los problemas a corregir para 2018 junto con el de la inflación que cerraría el año, según la Bolsa, en torno al 23,3%.