Por Alejandro Moreno
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“El único que fue en contra de la Unión Cívica Radical fue él”, dijo ayer a Alfil el jefe de campaña de Cambiemos, Orlando Arduh, reprochándole a Dante Rossi que presentara su propia lista en las PASO. Rossi es una de las piezas que faltan para completar el rompecabezas radical rumbo a octubre.
Para Arduh, Rossi tiene que darle explicaciones al presidente del Comité Central de la UCR, Alberto Zapiola, e incluso a los de los otros partidos miembros de la alianza (PRO, Coalición Cívica-ARI y Frente Cívico). “El Congreso partidario había resuelto por unanimidad ir en una lista de acuerdo en Cambiemos, y para eso se lo había facultado al presidente, pero él decidió presentarse en forma personal”, le cuestionó. “Faltó al mandato partidario”, lo retó, finalmente.
La semana pasada, después de las PASO, parecía que Arduh y Rossi iban a tomar un café protocolar para cerrar heridas, si las hubiera, y dejar atrás el episodio interno. Eso no ocurrió por diferencias de etiqueta, pero debería suceder razonablemente en los próximos días.
En las PASO, el alfonsinista Rossi logró casi el 7 por ciento de los votos, con lo que la distancia entre Cambiemos (las dos listas) y Unión por Córdoba llegó a 16 puntos. Como es de suponer, macristas y radicales necesitan contener los votos de los díscolos rossistas para sostener, y si fuera posible aumentar, la diferencia con el peronismo en octubre. Claro que para ello habría que examinar bien de cerca la naturaleza de los votos que Rossi, muchos de los cuales podrían ser difíciles de mantener en Cambiemos de tan críticos a los métodos macristas y mestristas.
La unidad de los aliancistas es fundamental para lo que viene. Por esa razón, el comando de campaña incorporaría nuevos miembros, que reflejen la nueva situación.
Además de Rossi, a quien ahora quieren trabajando por la lista que encabeza el macrista Héctor Baldassi, la campaña incorporaría a otros tres importantes dirigentes que estuvieron ausentes en las PASO.
Los “nuevos”
Uno de ellos es Mario Negri, quien el lunes 28 debutaría con un acto en el local de Luz y Fuerza. Negri desapareció en toda la campaña de las PASO, pero fue el que se llevó el premio más grande, porque Mauricio Macri lo hizo subir al escenario porteño, donde se festejó la elección de Cambiemos, y le agradeció por el resultado en la provincia de Córdoba. El jefe de los diputados nacionales de la coalición sólo había estado en el acto de cierre, y porque del mismo participaba Macri. Negri reconoció, con las urnas aún calientes, que tiene aspiraciones de ser gobernador de Córdoba en 2019, por lo que la tarea que se viene también le servirá a él.
Oscar Aguad tuvo también un protagonismo reducido a una reunión encabezada por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y a un timbreo barrial. Ahora, tendría más que hacer, para aprovechar que, como Negri, tiene buena imagen en la opinión pública, según las encuestas.
El tercero de la lista es Miguel Nicolás, un referente territorial de peso cuya estructura se inmovilizó para las internas abiertas, en desacuerdo con la confección de la lista de Cambiemos.
Todos ellos -Rossi, Negri, Aguad y Nicolás- expresaron el malestar con el mestrismo, que ocupó con dirigentes propios los tres espacios que había para la UCR en los cinco lugares expectables de la lista.