Doble vara K: Carro va contra Aguad, pero calló por Milani

El candidato kirchnerista disparó contra el radical cordobés, que asume hoy como titular del Ministerio de Defensa. Silencio K sobre el ex titular del Ejército.

La cara visible de la lista Córdoba Ciudadana, Pablo Carro, utilizó el tramo inicial de la campaña hacia las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) para reforzar la identidad ultrakirchnerista de su espacio.
En el plano interno, Carro reunió ayer a la militancia en un acto en Alta Gracia, en un intento de superar las fisuras que por años han balcanizado al kirchnerismo en numerosas tribus. Mientras tanto, en público, Córdoba Ciudadana se encargo de replicar el lanzamiento de la campaña de Cristina Fernández de Kirchner, en un intento por ligar las candidaturas locales a la expresidenta.
En la misma línea de robustecer su perfil kirchnerista, Carro aprovechó los cambios que el presidente Mauricio Macri realizó en su gabinete de ministros para disparar contra el nuevo titular del ministerio de Defensa, el cordobés Oscar Aguad.
La superlativa preocupación por el perjuicio que la designación de Aguad causó en Carro y el kirchnerismo cordobés contrasta con el silencio que han mantenido en relación a Cesar Milani, el exjefe de Ejército de Cristina de Kirchner, imputado por presuntos delitos de lesa humanidad.

Doble estándar
El gobierno nacional decidió meses atrás que aquellos funcionarios fuesen designados como candidatos para los comicios legislativos de este año, deberían renunciar a sus puestos al momento de iniciar la campaña hacia las PASO. La medida fue pensada como una forma de contrastar con la gestión anterior, que hizo uso indiscriminado de las candidaturas testimoniales.
Como consecuencia, el viernes tres miembros de la primera línea del gabinete nacional dejaron sus respectivas carteras. El titular de Educación y Deportes, Esteban Bullrich, deja el paso a Alejandro Finocchiaro, quien viene de ocupar la misma responsabilidad en la provincia de Buenos Aires. En el Plan Belgrano, el tucumano José Cano cede su lugar a su correligionario correntino Carlos Vignolo, quien pasará a encabezar la unidad ejecutora de planes de desarrollo del norte argentino.
Finalmente, en Defensa, el enroque ministerial significa la salida del riojano Julio Martínez y la llegada del cordobés Oscar Aguad, y el efecto colateral de la supresión del Ministerio de Comunicaciones que éste ocupaba.
Fue esta última designación la que hizo despertar al kirchnerismo cordobés, que decidió construir de Aguad un símbolo de la supuesta avanzada macrista contra las políticas de derechos humanos. Carro, como su principal exponente del momento, se encargó de darle difusión al comunicado firmado por cinco organizaciones del espacio: H.I.J.O.S. Regional Córdoba, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas de Córdoba, Abuelas de Plaza de Mayo Córdoba, Asociación Civil de ex Presos Políticos de Córdoba y Ex Presos Políticos de Córdoba por la Patria Grande.
El texto realiza dos imputaciones contra Aguad, cuyo apodo “el Milico” suele ser tomado como una muestra de supuesta adhesión a los golpes militares y no una anecdótica referencia a su paso por el Liceo Militar. Por un lado, se recuerda el vínculo que el ahora ministro habría tenido con Carlos “el Tucán” Yanicelli, quien hoy cumple condena por crímenes durante la última dictadura. Por el otro, reflota la descontextualizada (y única) foto en la que Aguad comparte el palco de honor con el represor Luciano Benjamín Menéndez.
“Hoy Menéndez cumple 14 condenas perpetuas por miles de crímenes atroces, pero Aguad sigue siendo premiado con altos cargos públicos por un gobierno que en campaña dijo que iba a respetar la memoria y no hace más que agraviarla”, afirma el comunicado, sin diferencias las evidentes diferencias entre el represor y el ministro.
“Hace muy poco, cientos de miles de ciudadanos nos movilizamos contra el intento de beneficiar con el 2×1 a los genocidas condenados, cotidianamente vemos gestos desde el gobierno nacional promoviendo el negacionismo. Pero las banderas de Memoria, Verdad y Justicia no son trapos, son pilares básicos para construir una cultura democrática, de respeto, igualdad y justicia social. Por eso solicitamos que esta decisión sea revisada.”, reafirma el documento.
El desproporcionado pedido de remoción de Aguad contrasta con el silencio que las tribus kirchneristas de Córdoba (con Carro como referente) mantienen al respecto del también represor Milani. A diferencia del ministro, quien no ha sido objeto de ningún tipo de acusación por delitos de lesa humanidad, el exjefe del ejército ha sido procesado por desaparición de personas durante la última dictadura.
La repetición del relato kirchnerista a pie juntillas parece ser una obligación para los candidatos de Córdoba Ciudadana, en su esfuerzo por lograr captar votos simpatizantes de la expresidente Cristina Fernández de Kirchner, ante la incapacidad de construir un proyecto superador de la etapa que ella supo liderar.