Bancor normalizó su situación frente al Central

El plan de reencuadramiento se inició en 2011. Ahora, con la aprobación, se prepara para emitir obligaciones negociables por 1500 millones de pesos para reforzar sus líneas hipotecarias.

Por Gabriela Origlia

bancorEn la inauguración de la remodelación del antiguo edificio del Banco Córdoba (frente a la plaza San Martín) –con una inversión de 250 millones de pesos- las autoridades cordobesas recibieron la buena noticia de que el Banco Central encuadró a la entidad dentro de las normas y relaciones técnicas dispuestas por la autoridad monetaria.
“Es un orgullo, y la recuperación del Banco de la Provincia, que hoy vuelve a ser de los cordobeses porque dejó de ser intervenido y pasó a tener la autonomía plena que tiene cualquier banco en la República Argentina”, señaló el gobernador Juan Schiaretti.
El Banco Central, a través de la Resolución Nº 437, ordena “dar por concluido el proceso de saneamiento” de la entidad cordobesa, ponderando así la evolución favorable de todos sus indicadores.
“Quiero reiterar lo que dije en otras oportunidades. Vamos a buscar los mecanismos para que el Banco de Córdoba, ahora que volvió a ser nuestro, nunca más pueda ser fundido por ningún gobierno. Y lo haremos a través de una ley que sólo se pueda cambiar con mayoría agravada”, planteó Schiaretti.
Y agregó: “La continuidad del Banco de Córdoba en manos de la sociedad cordobesa debe ser una política de Estado que trascienda a cualquier gobierno. Y esto exige de un consenso de todas las fuerzas sociales y políticas”.
Por su lado, el presidente de BanCor, Daniel Tillard, planteó que encuadramiento Bancor emitirá en los últimos meses de este año obligaciones negociables por 1.500 millones de pesos para otorgar más créditos hipotecarios.
Schiaretti anticipó que enviará un proyecto de ley a la Unicameral para limitar el financiamiento de la entidad para el sector público. Ese fue uno de los problemas que determinó que el Central debiera monitorear el proceso de saneamiento del banco.
Las autoridades de BanCor, en un principio, proyectaron que la resolución del Central decretando el saneamiento iba a llegar mucho antes; hace varios años que insisten en que todos los trámites y objetivos se cumplieron. La decisión es clave para el fortalecimiento de la entidad sobre todo, a nivel internacional ya que mejora los niveles de confianza.
El proceso de encuadramiento comenzó en el 2004, cuando el banco se convirtió en sociedad anónima con un accionista estatal. En 2011, su presidente Ricardo Sosa –hoy miembro del gabinete- presentó el plan que se fue cumpliendo hasta ahora. Schiaretti aprovechó para recordar –sin dar nombres- a las gestiones provinciales que “fundieron” a la institución.
A mediados de abril el Córdoba presentó una línea de créditos hipotecarios a 20 años de plazo, por hasta dos millones de pesos, con una tasa de 5,90 por ciento anual, indexable por el sistema UVA. Además, cuenta con los Procrear.
El crédito permite financiar hasta el 75% del valor de la propiedad a comprar o hasta el 100 por ciento del valor del proyecto, para el caso de la construcción. Si llega a un millón de pesos, el grupo familiar deberá demostrar ingresos por 32.240 pesos, con una cuota inicial de 7.183 pesos. Si es de dos millones, la cuota es de 14.337 y los ingresos demostrables deben sumar 47.790.
En marzo la legisladora del PRO Soher El Sukaria presentó un proyecto para que la Provincia no cobre Ingresos Brutos a los intereses de los créditos hipotecarios (como ya ocurre en la Ciudad de Buenos Aires); más tarde fue avalado por el interbloque Cambiemos y la semana pasada el oficialismo lo volvió a comisión después de debatirlo en el recinto.
En Córdoba Ingresos Brutos es el ocho por ciento sobre los intereses que se aplican en la cuota pura; es una de las alícuotas más altas para la actividad comercial. El objetivo es que se establezca una eximición para los préstamos con garantía hipotecaria para compra o construcción de vivienda única y familiar, tanto en las líneas del Procrear como en las que se ajustan por UVA o los sistemas francés y alemán.