Por Gabriel Osman
goman@diarioalfil.com.ar
En las primeras elecciones directas en la UNC no hubo sorpresas en la categoría más importantes de estos comicios, que fueron la elección de decanos en siete Facultades. Sin sorpresas en los resultados pero sí en su calidad. El oficialismo rectoral retuvo las cuatro Facultades que expuso y el kirchnerismo hizo lo propio en las tres unidades académicas que gobierna. En siete puntos se resume lo principal de estas complejísimas elecciones: 1) Conrero (Agro) aplastó a su rival. 2) Pérez (Lenguas) ganó con margen notable. 3) Epico triunfo de Marchicio (Arquitectura); 4) Lutri (Odontología) se impuso en una elección difícil en la única Facultad con tres candidatos. 5) Iriarte (Famaf) ganó pero perdió muchos votos a manos de Lamberti. 6) Chiabrando (Químicas) ganó con relativa comodidad. 7) En Filosofía no se habían suministrado resultados con algún detalle y sólo entregaron un dato: triunfo por más del 60% del kirchnerista Juan Pablo Abrate sobre el peronista Andrés Miguens.
1) Marcelo Conrero pudo exhibir el triunfo más holgado al retener el Decanato de Agropecuarias ganando en las seis categorías de estos comicios ponderados. Lo suyo fue paliza y – guste o no – lo ubica en lugares expectables para el futuro institucional de la Universidad. Los números así lo indican: Docentes titulares 79%, Docentes adjuntos 70%, Docentes auxiliares 74%, No Docentes 84%, Egresados 67% y Estudiantes 75%.
2) En elecciones muy complejas, Elena Pérez había llegado al Decanato de Lenguas con nueve de los 18 votos en las elecciones indirectas de 2014, pero ayer ganó con notoriedad en todos los estamentos, lo que indica que en los tres años de su mandato desplego pericia tomando grandes bocados de la oposición. No se conocían anoche los resultados menos importantes que son para elegir a las autoridades en el centro de estudiantes, que desde años controló el Aiel (kirchnerismo), pero en el tramo para decano los radicales de la Franja Morada lo doblaron en votos: 1.443 contra 733. Nada hace presumir una vuelta de campana en la elección del Centro.
3) Mariela Marchicio logró finalmente retener el Decanato de Arquitectura, que tenía pronósticos de resultado abierto (por la impericia del hasta hoy decano Ian Duttari que lo ubica en las antípodas de Elena Pérez). Y lo hizo con comodidad y en todos los claustros. Valga recordar que Duttari había “logrado” perder mayoría en el Consejo Directivo de la Facultad, por lo que en elecciones indirectas habría perdido diez a ocho la elección.
4) Mirta Lutri logró su reelección en Odontología con el 41% de los votos (impactando la ponderación de claustros), sólo un punto más de los necesario para no ir a balotaje. Claro que tuvo que bailar con el más feo: fue la única Facultad donde hubo tres candidatas. Había logrado casi el 36% de los votos y faltaba despejar los números del claustro estudiantil que impacta en el 33%. Esta incógnita se despejó pasadas las 23.00. Lo perdió pero como sólo le faltaba un 4% para hacer masa crítica (40%), sumó sólo el 5% pero le alcanzó para ganar.
5) La hirsuta Mirta Iriondo, el kirchnerismo más duro de la UNC junto a Diego Tatian, ganó en todos los tramos en Famaf, salvo en el de no docentes donde empataron los dos candidatos: 26 a 26. Lo suyo fue un triunfo fue claro aunque más medido, y el debut de Pedro Lamberti -un físico de prestigio pero discreto en sus procedimientos porque su armado fue atado con alambres y rechazó cualquier ayuda externa- fue más que auspicioso. Una ventaja grande para la todo terreno Iriondo. En los próximos días se podrá despejar una conjetura que sobrevolaba anoche: para ganar como ganó deben haberla votado mayoritariamente los docentes del Observatorio Astronómico que ella había excluido del padrón y que las autoridades electorales la obligaron a reincorporar. De ser así habrá que concluir en la “República de Castalia” hay autoflagelantes o, al menos, sufren el “síndrome de Estocolmo”.
6) Gustavo Chiabrando obtuvo más del 60% de los votos, por lo que este debut de las indirectas lo pone en la cima del podio de los kirchenristas que fueron a reelección. Más todavía si se consideran los pronósticos de “resultado abierto” que existían para su Facultad. Pesó seguramente su prestigio científico y una prolijidad y mesura que no muestran la áspera Iriondo y el talibán K Diego Tatian.
7) Filosofía no había suministrado resultados medianamente discriminados y al cierre de esta edición hubo que conformarse con el genérico “más del 60%” que suministraron para el candidato K apadrinado por Tatian, Juan Pablo Abrate.
A diferencia de de Famaf y Filosofía, Químicas puede mostrar un mejor resultado en términos de calidad. Las otras dos unidades académicas han sido el punto de apoyo del kirchnerismo universitario en la UNC, al punto que los dos rectores del kirchnerato salieron de esas dos Facultades: Carolina Scotto (dos mandatos) y Francisco Tamarit (uno). De estas Facultades difícilmente salga hoy un rectorable.