Sergio Berni y los Underwood

En realidad, convengamos que con lo que hemos vivido en la Argentina durante los años de los Kirchner, los Underwood se nos aparecen más como una Familia Ingalls que como la encarnación del diablo.

Por Gonzalo Neidal
gonzalo.neidal@gmail.com

No sabemos quién asesora al ex secretario de seguridad de Cristina Kirchner Sergio Berni en su pretensión de instalarse como candidato en las próximas PASO.
Pero algo no está saliendo bien. O al revés: está realizando una verdadera ruptura epistemológica en materia de publicidad electoral.
Nos explicamos: Berni ha hecho circular un vídeo donde aparecen los personajes centrales de la serie de Netflix House of Cards confesando su preferencia para las PASO. “Yo también prefiero a Berni”, dice Claire tras la propuesta que su marido le hace en tal sentido. O el candidato no ha visto la serie o bien no la ha entendido del todo. Estas son dos de las posibilidades. Pero hay más variantes.
La pareja Underwood gobierna los Estados Unidos por el Partido Demócrata y lo hacen con el manual de Maquiavelo bajo el brazo. Con gran amor por el poder, perpetran todo tipo de malas artes para conservarlo y extenderlo. Traiciones, delaciones, asesinatos, engaños, trampas, manipulaciones, sobornos, aprietes, chantajes, extorsiones y toda la panoplia que uno pueda imaginar es utilizada por el matrimonio con naturalidad y descaro. Por eso, no se entiende bien cuál es la intención de Berni al referenciarse con los Underwood. ¿Es una promesa de manejar el poder con esa inclinación por el mal? ¿O será que Berni no ha comprendido bien el grado de ausencia de escrúpulos que la serie relata?
Existe otra posibilidad: que Berni haya entendido bien todo, que sea plenamente consciente del estilo político de Francis y Claire y que sea justamente por ese motivo que asocia a ellos su candidatura. Ha de pensar que hay mucha gente que quiere que la argentina tenga gobernantes como ellos: tramposos transgresores de la ley.
En realidad, convengamos que con lo que hemos vivido en la Argentina durante los años de los Kirchner, los Underwood se nos aparecen más como una Familia Ingalls que como la encarnación del diablo. Pero existe la percepción muy razonable de que eso es precisamente lo que una amplia franja de votantes intenta cambiar. La publicidad de Berni nos dice: “Si quieren votar a alguien como los Underwood, aquí estoy yo”.
Se nos ocurre que es como si un banco contratara para su publicidad al Gordo Valor. O una guardería para niños proclamara a Herodes como una guía espiritual de su trayectoria.
Ahora bien, si Berni quiso realmente decir que él propone ese estilo de gobierno, de todos modos debió omitir abrazarse a los protagonistas de House of Cards.
No sólo porque se trata de una serie imperialista, para nada Nacional y Popular.
Sino, simplemente, porque con sacarse una foto con Cristina le alcanzaba.