Académicos K se embanderan a favor de Milagro Sala

La plana mayor del kirchnerismo universitario adhirió a la declaración del colectivo “Universidades por la libertad de Milagro Sala” que reclama la libertad de la dirigente jujeña de la organización paraestatal Tupac Amaru.

tamarit-iriondo-tatianEl kirchnerismo universitario, alejado en lo real y en lo simbólico del poder en la UNC, ha decidido embanderarse por una de las causas estandarte de la cruzada antimacrista.
Se trata del pedido de liberación de Milagro Sala, la activista jujeña que fue detenida por la policía de su provincia en enero pasado, tras serias denuncias sobre su rol al frente de la organización barrial Tupac Amaru, que encabezó por años.
La plana mayor de los académicos K adhirió a la declaración del colectivo “Universidades por la libertad de Milagro Sala”, incluyendo a la exdupla rectoral conformada por Francisco Tamarit y Silvia Barei, y a varios decanos en funciones.

Cambio de roles
Hace tan solo seis meses, el kirchnerismo universitario guiaba con sus designios los destinos de UNC. Medio año más tarde, las condiciones políticas y las relaciones de fuerza invirtieron su sentido, y el colectivo de académicos K se ve obligado a mutar sus conductas para intentar conservar alguna cuota de centralidad política.
La estrategia elegida es la del encerramiento en la guarida ideológica del kirchnerismo fervoroso, desde la que los principales actores políticos de la UNC de los últimos tres años hacen gala de sus adhesiones partidarias.
En esta oportunidad se trata de la adhesión al pedido de liberación de la jujeña Sala, cuya organización Tupac Amaru ha sido acusada no con pocos argumentos de paraestatal. Dicho pedido está coordinado por los rectores kirchneristas de todo el país, quienes han sumado a dirigentes de cada una de sus casas de estudio.
El texto de la declaración asevera que la jujeña fue detenida “ilegalmente” en su provincia, y reivindica su rol de miembro del Parlasur, órgano legislativo de los países del Mercosur, en el que casualmente fueron a parar tras los últimos comicios otros kirchneristas con problemas con la justicia, como el devoto José López.
Además, el comunicado reza: “científicos, investigadores del Conicet, rectores, decanos, docentes y otros trabajadores de universidades públicas de toda la Argentina nos manifestamos con enorme preocupación por la policialización y la suspensión de los derechos civiles, sociales, democráticos y humanos en la Provincia de Jujuy; expresamos nuestra solidaridad con su pueblo y en particular con la organización Túpac Amaru, a la vez que reclamamos la inmediata liberación de la parlamentaria Milagro Sala (…); exhortamos al cese de la represión contra trabajadores y la restitución de las garantías democráticas para todas las organizaciones y militantes sociales en la Provincia de Jujuy.”
El texto cuenta con el acompañamiento del exrector Tamarit, su exvicerrectora Barei, y los decanos de Filosofía y Humanidades, Diego Tatián, de Famaf, Mirta Iriondo, y de Artes, Myriam Kitroser. Asimismo, firmaron la declaración las dos decanas normalizadoras: Silvina Cuella, de Ciencias Sociales, y Mariela Parisi, de Ciencias de la Comunicación.
También acompañaron con sus firmas la vicedecana de Filosofía, Alejandra Castro, de Famaf, Nesvit Castellano, y de Artes, Gustavo Alcaraz. A pesar de que su decano no firmó, la vicedecana de Ciencias Químicas, Ana Baruzzi, sí lo hizo. De la misma forma avaló la misiva el consiliario de Famaf, Agustín Berti.