¿Precandidato?
El actual presidente del Tribunal de Cuentas de la Provincia, Eduardo “Lalo” Barrionuevo renovó ambiciones recientemente. Con la agrupación “Acción para el Triunfo Peronista” hizo públicas sus intenciones de “recuperar” la ciudad. Con una volanteada por las calles céntricas y la compañía de un grupo de militantes, denunció al intendente Ramón Mestre en lo que refiere a sus políticas de manejo del sistema de transporte urbano. “Nos preguntamos a dónde va a parar el dinero del transporte, porque el dinero no duerme”, decía el ¿precandidato a intendente?
Hijos en la Casa Radical
Ayer el periodista conversó con un dirigente del Comité Central de la Unión Cívica Radical para conocer la agenda de la semana. El dirigente lo sorprendió avisándole de un evento importante.
Dirigente radical: Importante y curioso.
Periodista: ¿De qué se trata?
D.R.: ¿Usted sabe que en el partido funciona la Escuela de Formación Política “Raúl Ricardo Alfonsín?
P.: Sí, por supuesto.
D.R.: Pues bien, el viernes a las 17, habrá una jornada de “Justicia y derechos humanos”.
P.: Ajá.
D.R.: Anote los nombres de los disertantes: el ex juez federal Ricardo Gil Lavedra, integrante del Tribunal Federal que condenó a las juntas militares, la fiscal federal Graciela López de Filoñuk, que actúa en Córdoba en los juicios por delitos de lesa humanidad, y, acá viene lo más notable, la presidente de la Agrupación Hijos, Silvia Di Toffino. Va a moderar Guadalupe Mías.
P.: ¿Así que la agrupación Hijos irá a la Casa Radical? Sí que es una novedad. Imagino que habrá polémica. Di Toffino algo dirá sobre las leyes de Obediencia Debida y Punto Final. ¿No le temen a eso?
D.R.: Yo también creo que habrá polémica, pero espero que sea una explosión controlada. De todas formas, es una muy buena señal de apertura del partido.
El PRO no para de ganar
La filial local del partido que encabeza a nivel nacional Mauricio Macri no para de cosechar éxitos. Un dirigente macrista contó al periodista el nuevo poroto que se sumó el PRO Córdoba, luego de que se consolidara con fuerza política en la provincia, en la elección que consagró al exárbitro Héctor Baldassi como diputado nacional.
Dirigente macrista: Ganamos el centro vecinal de barrio Pueyrredón.
Periodista: Lo felicito. ¿Con cuántas listas se midieron?
DM: Con una nómina de candidatos kirchneristas. Nuestra lista fue el resultado de una alianza con la UCR barrial.
P: ¿Una prueba piloto para lo que vendrá?
DM: (Risas) Nuestro candidato ganó bien. Obtuvo 100 votos más que el candidato opositor sobre un padrón de 400 vecinos.
P: ¿Quién fue el favorecido?
DM: Acá le cuento lo más lindo. Ganó “Chelo” Ardiles.
P: …
DM: ¡Es un hombre de 75 años! Si usted pudiera ver su entusiasmo. ¡Un grande!
P: La nueva política…
DM: En fin, “La Coneja” Baldassi fue a felicitarlo personalmente.
P: ¡Qué sigan los éxitos!
Todo tiene un límite, o no
La capacidad del peronismo para asimilar dirigentes tuttifrutti es innegable. Y también la capacidad de desconocerlos. Una divertida charla mantuvieron dos dirigentes de capital de ese movimiento ayer, café de por medio, en una mesa del auditorio del Holiday Inn, tras la exposición del gobernador de Buenos Aires. Estaba el periodista de Alfil de cuerpo presente.
Dirigente PJ 1: Acabamos de escuchar al próximo presidente.
Dirigente PJ 2: Va cerrando la historia verdad. A mí también me gusta el perfil de Scioli.
D.PJ 1: en realidad no dice mucho él. Es un gris, pero qué bien que cae.
D.PJ 2: Es un desarrollista. Y oportunista. No es bueno definirse ahora. Falta un año aun.
Periodista: Disculpen. No quiero ser grosero. Pero me gustaría hacerles dos preguntitas al respecto.
D.PJ 1: Diga.
D.PJ 2: Pregunte no más.
P.: ¿Estuvieron ustedes cuando vino Massa?
D.PJ 1: No hombre. Todo tiene un límite. Somos peronistas.
D.PJ 2: Yo tampoco estuve. Escuchar a ese liberal, no.
P.: Perfecto. ¿Acaso no eran ustedes dos kirchneristas cuando Massa fue Jefe de Gabinete?
D.PJ 1: Mire quien está ahí. Un viejo conocido. Ya vengo. Disculpen.
D.PJ 2: Si cuánto tiempo. Yo también quiero saludar. Disculpe señor periodista. En un rato volvemos.