
[dc]A[/dc]placado el vértigo pos electoral, el kirchnerismo retomó su agenda interna. El Foro de Intendentes K convocó ayer al ecumenismo “nac & pop” para pasar en limpio los números del 27 de octubre. El balance obviamente fue positivo. Superar la barrera de los 15 puntos fue más que un objetivo, una sorpresa, que hasta los más venturosos operadores no tenían en mente.
Con la mira puesta en el 2015, los K apuntan a consolidar y extender su estructura. Saben, en definitiva, que una porción de ese caudal de votos no les pertenece, sino que forma parte de un sufragio más bien volátil, que cambia con la coyuntura.
El encuentro de ayer en un coqueto hotel céntrico reunió a casi la totalidad de las expresiones que tributan a la Casa Rosada. La única vertiente que no participó -probablemente por su falta de contacto con este segmento que nuclea a referentes del interior- es la gremial. Una muestra de que aún no están aceitados los vasos comunicantes entre las distintas expresiones que comulgan en el proyecto nacional y popular. Allí la primera tarea a superar.
Pero más allá de esta ausencia puntual, el cónclave contó con una nutrida concurrencia: los dos diputados electos, Carolina Scotto y Martín Gill, el intendente de Villa María, Eduardo Accastello -del quinteto de referentes, Martín Fresneda, tenía agenda en Buenos Aires y Mauricio Saillén, no fue invitado por los motivos ya mencionados-, referentes de las agrupaciones, emisarios de la sucursales ministeriales nacionales y 45 intendentes participaron de la primera reunión masiva tras los comicios.
De los 4 jefes comunales que integraron la lista, Ernesto “Tatú” Bernabey (Villa de Totoral) y Juan Manuel Pereyra faltaron con aviso. Gabriel Fernández (Viamonte) y Sandra Dal Bo (Cavanagh) fueron los anfitriones del encuentro, al que faltaron una decena de intendentes.
Pasadas las elecciones, el número de miembros de Foro finalmente decantó. A principio de año era más de 80 y ahora alcanzan los 55. Una merma considerable en cantidad, pero que supone una consolidación en la calidad de la devoción a la Casa Rosada.
Uno de los datos más novedosos fue la incorporación como miembro pleno de Accastello a las filas del Foro. Está claro –los números electorales lo respaldan- que el intendente de Villa María no necesita de este aval de sus colegas, su peso específico le otorga un sustento para ser más que un “primus inter pares”. De hecho, ya lanzó su candidatura a gobernador para el 2015.
El hombre fuerte del departamento General San Martín siempre fue un líbero. Si bien participó de la campaña y hasta estuvo incluido en la lista como primer suplente, sus contactos en la Casa Rosada (entre los que puede también incluirse su estrecha relación con Gill) le valieron para gozar de cierta autonomía sobre el armado y del resto de los intendentes.
Integraron este primer reencuentro pos electoral, el titular del Ministerio de Desarrollo Social y también referente de Kolina, José Bianchi; la responsable del Anses y de La Cámpora, Gabriela Estévez y el director del Pami, Fernando Gómez, entre otros dirigentes de agrupaciones como JP Descamisados, movimiento Evita y la Jauretche. También participó el legislador provincial del Frente para la Victoria (FpV), Fernando Salvi.