[dc]L[/dc]a presidente del bloque de legisladores del Frente Cívico (juecismo & aliados), Liliana Montero, anticipó ayer a Alfil el rechazo a la reelección del actual defensor del Pueblo, el radical Mario Decara.
El mandato de Decara concluye el 10 se septiembre y la Legislatura debería votar, en la sesión del próximo miércoles, el nuevo Defensor del Pueblo con el acuerdo de los dos tercios de sus miembros, o sea de 47 de ellos. Pero en la Cámara no hay clima de votación, por lo que la designación del funcionario podría postergarse hasta después de las elecciones del 27 de octubre. Unión por Córdoba tiene 43 legisladores pero 44 bancas, porque con dos de sus miembros de licencia que regresen se cae el macrista Javier Pretto. El ex juecista Rubén Borello acompaña la mayoría de las iniciativas del oficialismo y así se suman 45 votos; faltan apenas dos para no necesitar de nadie, pero podría recurrirse a los faltazos sorpresivos para bajar la base, como sucedió en 2008 con cuatro legisladores.
Decara, la semana pasada, hizo llegar a los legisladores radicales, a través de una carta firmada por intendentes de la UCR del departamento Punilla, una clara expresión de su voluntad reeleccionista. El radical espera la reedición de un pacto político con el peronismo para continuar cinco años más en el cargo.
Desde el Frente Cívico, entonces, apuraron una respuesta. Montero dijo que de ninguna manera apoyarán a Decara, y que, en cambio, propondrán un “independiente”.
“Decara significa la ratificación de la alianza peronista-radical”, advirtió Montero. En 2008, Decara fue electo como resultado de un acuerdo entre el peronismo y el nicolacismo.
Como en aquella oportunidad se resolvió, al margen de lo que indica la Constitución, que el Defensor del Pueblo sea elegido por los dos tercios de los presentes, Montero afirmó que exigirán esta vez que el funcionario surja con “dos tercios del total de la composición de la Cámara”.
“Decara tiene ilegitimidad de origen, porque fue electo por un procedimiento ilegal”, sentenció la legisladora. “Por eso, ni siquiera discutimos su gestión, que tuvo algunas cosas interesantes pero nunca acusó al poder político de Córdoba”, agregó.
Montero consideró muy probable que el Frente Cívico proponga un candidato, pero a título personal sostuvo que debe ser “alguien surgido de la sociedad civil, no de un partido político, ni siquiera del nuestro”.
“La Defensoría del Pueblo es un instituto importante como para partidizarlo, y de hecho, la contaminación partidaria ha impedido que sea buena esa representación”, opinó.